Funciones terapéuticas

El percutor yin-yang permite actuar sobre una gran variedad de trastornos. Y es que se ha comprobado clínicamente que la alternancia de estimulación de puntos puntos fijos del rostro (puntos·bqc) y percusión sobre las zonas multirreflexológicas acelera los resultados del tratamiento.

Cálculos renales: Se obtienen excelentes resultados al percutir sobre las zonas reflejas de los riñones en la frente –zona de los puntos·bqc 300·–. Conviene hacerlo de forma sostenida unas trescientas veces cada día, con el extremo de goma, yang.

Dolores de garganta: se alivian rápidamente percutiendo a lo largo de las patillas (zona de los puntos·bqc 14· y 275·) durante 2 minutos con el extremo de goma, yang.

Dolor de cabeza o migrañas: Se recomienda usar su extremo de púas, yin, ejerciendo un martilleo muy suave sobre las sienes unas veinte veces.

Tratamiento antiestrés y relajación de los trapecios: Percute unos tres minutos en total los puntos 124· –en la frente– y 34· –entre las cejas–. Notarás como los hombros y el trapecio se relajan rápidamente.

Uso y disfrute

Este instrumento ofrece grandes resultados con un sencillo manejo, ya que permite estimular los puntos fijos del rostro con la misma eficacia que el detector (herramientas nº101 y nº103).
Por ello es una de las herramientas preferidas tanto del principiante como del experto, ya que muchos tratamientos cotidianos pueden realizarse sin necesidad de mirarse al espejo.

A continuación te indicamos los tiempos de aplicación recomendados para la utilización terapéutica de los extremos yin y yang.
Extremo yin (púas): Percutir muy suavemente la zona durante unos tres minutos.
Extremo yang (goma): Percutir de manera ligera y sostenida durante dos minutos sobre cada punto.

Secreto de Chan❜beauté

De eficacia clínica comprobada en la gestión del estrés, es imprescindible para la mujer ocupada.
Cómo: Se puede utilizar por el extremo que resulte más agradable, dando veinte golpecitos en los puntos sensibles del rostro y haciendo un último repaso al terminar para asegurarse una relajación completa.
Si los hombros y el trapecio están sobrecargados, percutir suavemente entre las cejas durante tres minutos.